Si bien el carnicero habló con respeto y hasta parecía sintonizar con algunas de las ideas de Antonio Laje -un defensor a ultranza de las medidas implementadas por el gobierno de La Libertad Avanza- a medida que iba contando por lo que estaba pasando, su discurso se ensombrecía.

Así terminó narrando el derrotero que lo llevó a salir a cortar el pelo durante la pandemia hasta el momento actual donde le cuesta vender un kilo de asado en una de sus carnicerías.