El gobierno de Mauricio Macri varía semanalmente el impacto mediático de su gestión según despida a miles de trabajadores, desplace a funcionarios que él mismo nombró hace menos de dos meses o lance un furibundo tarifazo.

El nuevo escándalo en el que está sumergido sucede al causado por el despido de la directora técnica del Indec, Graciela Bevacqua, a quien se achacó no atenerse a las "pautas políticas" del macrismo para elaborar, en tiempo y forma, convenientes índices de inflación.

El funcionario que sucede a Bevacqua –quien, por cierto, no se va con la boca cerrada– como director técnico del organismo es Fernando Cerro, un técnico cercano al ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

Pero hete aquí que, en 2014, Cerro fue denunciado por el actual ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, debido a la sobreestimación del dato del PBI que habría traído perjuicios económicos millonarios al Estado; denuncia que incluía a otros funcionarios, incluso a la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Según publica el diario La Nación, la denuncia de Prat-Gay fue contra "todo el sistema", pero también ponen al descubierto una interna que, en algún grado, corroe al macrismo, y que se manifiesta con nombramientos cruzados en distintos estamentos de gobierno sin consultar a otros ministros y secretarios involucrados en el área.