Los legisladores de Cambiemos lograron trabar en la cámara baja la propuesta de la oposición de interpelar en sesión al ministro de Energía, Juan José Aranguren, por los fuertes aumentos de tarifas en los servicios públicos.

Aunque desde el Frente para la Victoria anunciaron que la semana próxima insistirán con una convocatoria, el bloque macrista sólo se comprometió a convocar al ministro para que exponga ante un plenario de comisiones.

Entre las dos convocatorias a sesión especial, una del Frente Renovador (por interpelar a Aranguren y emitir una resolución de repudio a los tarifazos) y otra del kirchnerismo y la izquierda (por la interpelación y suspender los aumentos), finalmente se logró el quórum para la primera.

Sin embargo, la sesión giró en torno a cruces sobre cuestiones reglamentarias referidas al número de diputados para aprobar proyectos: mientras el oficialismo planteaba que deben ser dos tercios de los votos, la oposición se mantuvo en una mayoría simple.

Finalmente, el presidente de la Cámara, Emilio Monzó, determinó que eran necesarios los dos tercios, lo que disparó abucheos desde las bancas de la oposición y aplausos desde las del macrismo.

Tantos fueron los cruces y las protestas, que Monzó determinó un cuarto intermedio y un llamado a jefes de bloque para negociar.