"Hablamos de cerrar el 2016 para que la paritaria del año entrante refleje la inflación a partir de enero, febrero y marzo, y no como fue este año, que llevaron el arrastre de la inflación anterior. Esto nos permitiría ir a un sendero de mayor cercanía a la realidad", admitió Jorge Triaca.

Sin vueltas, el gobierno quiere saldar la inflación de este año, con ese bono de dos mil pesos. Es evidente que lo que va a terminar pasando, en caso de que el ministerio logre el objetivo, será que el salario pierda poder adquisitivo. 

El titular de la cartera laboral aseguró que esa idea fue apoyada por los representantes de la CGT ya que "quedó manifestado en el acta firmada" durante la reunión que mantuvieron junto a las cámaras empresarias, dijo en declaraciones a radio Mitre. 

Triaca evitó responder si el Gobierno actuará en caso de que las negociaciones fracasen, y en cambio resaltó que los propios sindicatos manifestaron durante el encuentro que "están dispuestos a dar facilidades" porque "son conscientes de la situación de los distintos sectores".

"El promedio de las paritarias da el 34 por ciento, pero para algunos, hay cifras disímiles, y por eso se planteaba un bono de fin de año para terminar de compensar el poder adquisitivo del salario", añadió.

Sobre los empleados estatales, dijo que cada jurisdicción "evaluará la situación y sus posibilidades", y adelantó que en los próximos días habrá novedades con respecto a la administración nacional.