El juez federal Claudio Bonadio firmó el procesamiento contra la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner por los presuntos negocios realizados a partir de la sociedad familiar Los Sauces, que se dedica al alquiler de propiedades.  Además, Bonadio le impuso un embargo de $130 millones a la ex presidente y otros de los procesados y les prohibió la salida del país a todos a quienes le dictó el procesamiento.

Durante la investigación a cargo de Bonadio y del fiscal Carlos Rívolo, se hallaron numerosas irregularidades en la documentación contable de Los Sauces y se reveló un entramado y vinculación de nombres y sociedades que, según explican en Comodoro Py, determinaron- entre otras cosas- el procesamiento.

Para el juez la ex presidente junto al fallecido Néstor Kirchner y su hijo Máximo Kirchner eran los jefes de una asociación ilícita que utilizaba la sociedad Los Sauces para ingresar allí fondos en apariencia lícitos pero provenientes de negocios relacionados con el Estado.

Bonadio considera además que Florencia Kirchner se incorporó a la jefatura de la supuesta asociación tras la muerte de su padre.