“Yo sé quién soy. Pero me doy cuenta que la gente piensa que Keith Richards está fumando un porro, tiene una botella en la mano y putea porque la licorería está cerrada”, son las primeras palabras que se escuchan del guitarrista.

'Keith Richards: Under the Influence', el documental de Morgan Neville, se propone salvar la distancia entre el ícono del rock mundial y la persona.

Además de las sesiones del disco y las entrevistas, el documental recupera material de archivo prácticamente inédito y acompaña a Richards por algunos lugares emblemáticos del rock & roll como Chicago, Nashville y New York City.

El film muestra los viajes de Richards que sirvieron para recordar algunas de sus etapas como músico: Chicago -donde se encontró por primera vez con Buddy Guy, Maddy Waters, Howlin´ Wolf y Chess Records- Nashville -donde se enamoró de la música country- y New York -donde sucedió la grabación propiamente dicha y trabajó con Steve Jordan y Waddy Wachtel.

Con fecha de estreno programada para el 18 de septiembre, esta producción de Netflix parte de las grabaciones de 'Crosseyed Heart', su flamante disco solista, pero también se interna en la profundidad de sus influencias musicales, así como el background familiar del violero de los Stones.