No entra en la categoría de broma pesada. Depositar sus heces en una cabina para probarse ropa, dentro de un local de ropa para mujeres, no es algo habitual y mucho menos, gracioso para las víctimas ocasionales.

Pero al parecer, en la capital chaqueña la ciudad de Resistencia, una mujer está dejando "tela para cortar" y "tela para descartar" también: visita locales de venta de ropa femenina, se prueba, compra, pero también hace sus necesidades más olorosas en el probador, utilizando las cortinas para limpiarse sus partes.

La noticia se conoció cuando un local de la galería Mariana, ubicado en el centro de Resistencia, contó el modus operandi de esta persona.

Se hizo pasar por una clienta, compró varias prendas, pasó a los probadores, salió, pagó y se retiró del local. Inmediatamente, los empleados comenzaron a sentir un "olor asqueroso" y, al entrar al probador, se encontraron con la "sorpresa".

El dueño del local relató lo sucedido en su cuenta de Facebook y especificó que la mujer utilizó las cortinas del lugar para higienizarse.

Tras dar a conocer la desagradable noticia en la radio, los dueños del local recibieron llamados de comercios vecinos informando que también habían sufrido el mismo ataque, incluso en la misma galería y también por parte de una mujer.