Ocurrió en la República Bashkortostán, en Rusia, donde Artem, de 18 años y Anna D, de 20, una pareja de jóvenes que llevaban saliendo hace unas semanas, perdieron la vida trágicamente luego de tener sexo en un coche que se encontraba estacionado en un garage.

Las bajas temperaturas motivaron a los jóvenes a dejar el auto en marcha con el sistema de calefacción. De esta manera, con el auto herméticamente cerrado, ambos finalmente murieron intoxicados con el monóxido de carbono expulsado por el vehículo.

Los padres de los jóvenes no estaban al tanto de la relación. Según contó la familia de Artem, él les había dicho que se iba a pasear por la ciudad y nunca volvió. Tras realizar la denuncia correspondiente, la policía comenzó una búsqueda hasta que finalmente los encontró muertos y desnudos dentro del coche.