Los médicos de un hospital en Lituania se vieron sorprendidos al ver que un bebé recién nacido tenía cuatro gramos de alcohol por litro sangre, esto es ocho veces el límite permitido para conducir en la mayoría de los países -0,50-.

La bebé nació con 2,5 kilos de peso y se encuentra en buen estado. Por su parte, la madre también se encuentra bien aunque ha sido acusada de alteración de la salud por el personal médico.

Según la Organización Mundial de la Salud, Lituania es uno de los países de mayor consumo de alcohol per cápita en Europa, lo que llevó a los legisladores de ese país a buscar formas de garantizar la protección de los derechos de los niños por nacer.