Se trata de Alexander Karle, de 38 años, quien fue multado con 740 dólares por el tribunal de la ciudad alemana de Saarbrücken, luego de publicar un video en donde se lo ve haciendo casi 30 flexiones de brazo sobre el altar de la basílica de San Juan, ubicada en esa localidad, ante la mirada atónita de un grupo de fieles.

El video, que además fue mostrado en pantalla grande en un centro de arte, produjo la reacción de la iglesia, que presentó cargos contra Karle por haber profanado un lugar de culto.

"La fe cristiana debería ser tratada con respeto", afirmó el sacerdote local Eugen Vogt, quien tildó lo acontecido de un acto de "provocación y ofensa."

El tribunal reconoció que la 'performance' del alemán carece de relevancia artística y el fiscal señaló que las "flexiones no presentan una condición necesaria para la prestación del derecho a la libertad de expresión y la expresión creativa del artista".