La australiana Jenna Louise Driscoll, de 26 años, se declaró culpable de los delitos de "bestialidad" luego de que la policía, que en realidad la buscaba por tráfico de marihuana, encontrara videos grabados en su teléfono celular donde mantenía sexo con un pitbull.

La policía de la localidad australiana de Brisbane investigaba a la mujer por la comercialización de esa droga. Entre los hechos que se le imputaron pudo comprobarse que en una ocasión intentó vender 113 gramos de cannabis por 1.150 dólares y en otra oportunidad fueron 85 gramos a 900 dólares.

La investigaron por tráfico de marihuana y descubrieron que tenía sexo con un perro

Los investigadores descubrieron los tres videos grabados por ella misma que la mostraban manteniendo relaciones sexuales con su perro durante la recopilación de pruebas.