Recientemente, un grupo de científicos explicaron que la expresión de culpa que adquieren los perros cuando hacen algo malo no es una señal de arrepentimiento, sino una simple reacción al comportamiento de su amo cuando este lo regaña. Por eso, aconsejan a los amantes de los perros ignorar las aparentes muestras de culpabilidad de sus mascotas, ya que los animales no son capaces de sentir vergüenza.


De todas maneras, siempre nos terminan ganando y nos enternecen, por lo que muchas veces resulta difícil enojarse con ellos. He aquí algunos perros "arrepentidos".