Una fuerte explosión en la entrada de un jardín de infantes en el este de China dejó este jueves un saldo de al menos siete muertos y 59 heridos, según informaron las autoridades locales.

La desesperación y el caos se adueñó de la mañana en el condado de Fengxian, en la provincia de Jiangsu y a unos 600 kilómetros al sur de Beijing, La policía investiga si se trató de un accidente o fue un atentado. 

"A las cinco de la tarde escuchamos un estallido y pensamos que había sido una explosión de gas en un puesto de comida cercano", relató un comerciante- que estaba en las cercanías- al diario local Sohu.