En un amplio gesto de confianza, el presidente ruso Vladimir Putin recibió en Moscú al premier israelí, Benjamin Netanyahu luego de su paso por la Casa Blanca en Washington.

"Una de las cosas contra la que estamos peleando juntos es el terrorismo islamista radical", destacó el primer ministro israelí al inicio del encuentro y remarcó el papel de Rusia en la  lucha contra el Estado Islámico (EI) y otros grupos islamistas radicales sunnitas en Siria, aunque manifestó su inquietud por la presencia en ese país de fuerzas de Irán, la potencia chiíta regional, y combatientes del grupo chiíta libanés y pro iraní Hezbollah.

"Rusia ha hecho una contribución muy importante. Naturalmente, no queremos que este terrorismo sea reemplazado por un terrorismo islamista chiíta encabezado por Irán", agregó Netanyahu; citado por la cadena de noticias CNN.

Además Rusia e Israel decidieron coordinar sus acciones para evitar cualquier posible cruce entre sus fuerzas militares en Siria. "El islam radical chiíta nos amenaza a nosotros y amenaza la paz de la región y del mundo, y sé que hay socios en nuestro deseo de impedir cualquier tipo de victoria del islam radical", clamó Netanyahu que no cuenta con un masivo apoyo popular en Israel en su papel como primer ministro.