El último miércoles, un arrepentido en la causa por el pago de sobornos en Petrobras implicó al Presidente interino Michel Temer poniendo un elemento más en la trama de corrupción estatal de Brasil. La mención, difundida por la Corte Suprema,  puede leerse en la declaración de Sergio Machado, ex presidente de Transpetro (una subsidiaria de la petrolera) que también se halla implicado en el escándalo de corrupción. 

En un documento de 245 páginas, Machado describe la forma en que operaba en Transpetro con contratos de precios inflados a empresas privadas para luego repartir las diferencias entre directores de la compañía y funcionarios cómplices. .

Además, parte de ese dinero corrupto se depositaba en las cuentas de los partidos bajo el concepto de "donaciones legales" para campañas políticas. Hasta ahora, Temer no había figurado en ninguna de las decenas de las declaraciones obtenidas por los tribunales en la investigación sobre Petrobras.

Machado afirmó que Temer le solicitó, en 2012,  ayuda financiera para la campaña electoral del  candidato, Gabriel Chalita,  del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB). 

Temer- que ya en ese entonces era vicepresidente de Rousseff- pidió una aportación de 1,5 millones de reales (hoy unos 428.500 dólares). para la campaña de la alcaldía de San Pablo.  Hasta el momento quien preside el Ejecutivo, de manera interina, emitió un comunicado y aseguró que lo declarado por Machado "no es veraz" y que en "toda su vida pública" Temer "siempre respetó estrictamente los límites legales para buscar recursos en campañas electorales" y "jamás" pidió dinero para financiarlas.