De acuerdo con un informe del Centro Nacional de Familias Desamparadas (NCFH), 2,5 millones de chicos estadounidenses se encontraban en situación de calle el año pasado, lo que equivaldría a uno de cada 30 niños.

El informe, publicado en la edición de esta semana de la revista Newsweek, detalla que del 2012 al 2013, el número de niños sin hogar en ese país, aumentó en un 8%, alcanzado un máximo histórico, según los datos aportados por el American Institutes for Research (AIR).

En este sentido, el estudio identifica seis causas principales que contribuyen a este número sin precedentes de niños sin hogar: las altas tasas de pobreza; la falta de vivienda asequible; las disparidades raciales; las dificultades que enfrentan las madres solteras; la violencia doméstica; y los efectos persistentes de la recesión.

Por su parte, el informe del NCFH detalló que el año pasado 2,5 millones de niños en Estados Unidos vivían en refugios, en las calles, en los coches, o en campamentos desprotegidos.

Frente a esto, la directora del NCFH, Carmela Decandia, comentó a Newsweek que era intolerable que una nación de riquezas y oportunidades como Estados Unidos tenga en el desamparo a uno de cada 30 niños, y consideró: "No hemos prestado atención y necesitamos llegar antes de que la meta se vuelva inalcanzable".

California es uno de los estados con más afectados, con casi 527 mil niños sin hogar, según el Departamento de Educación, que estima que esa cifra puede llegar a un millón 300 niños.

Del mismo modo, el número de niños sin hogar aumentó drásticamente en 31 estados, entre 2012 y 2013, con incrementos del 10 por ciento o más en 13 estados y Washington DC.

Junto a California, aparecen Alabama y Mississippi entre los estados más afectados, tomando en consideración los niños sin hogar, el bienestar infantil, el riesgo de la falta de vivienda de los infantes, y la política de planificación estatal.

Por su parte, en Minnesota, Nebraska y Massachusetts se reportan la menor cantidad de casos de menores de edad desamparados.

El informe presenta una serie de posibles soluciones para frenar ese problema, incluyendo la vivienda segura y asequible, educación y oportunidades de empleo para los padres, y la evaluación integral de las necesidades de cada miembro de la familia.