A pesar de contar con el tradicional Papamóvil y un riguroso dispositivo de seguridad en Jordania, el Papa Francisco fue a visitar el río Jordán acompañado por el rey de Jordania, que manejó un particular carrito para el traslado.

El sumo pontífice viajó a las aguas del río Jordán para visitar el lugar donde fue bautizado Cristo y durante el trayecto fue en un vehículo parecido a un carro de golf, sin ningún tipo de vidrio blindado para su seguridad.

Una vez en el lugar, saludó a los fieles y estampó su firma en la orilla.