A comienzos de semana se informó sobre la desaparición del embajador griego en Brasilia, Kyriakos Amiridis. En las últimas horas el macabro hallazgo de su coche y el cadáver totalmente calcinado bajo una autopista de Rio de Janeiro conmocionó a los brasileños. Sin embargo la historia aún mantiene datos sorprendentes: según la policía local, se trataría de un plan pensado y ejecutado por su esposa Françoise de Souza Oliveira y ejecutado por un joven policía militar que sería su amante, Sergio Moreira.

Según informó la cadena Globo, tanto la mujer como el oficial confesaron haber llevado adelante el asesinato del diplomático de 59 años con el fin de concretar su romance de manera oficial, aunque fueron detenidos e interrogados por separado.

Moreira, de 29 años, reconoció haber matado al embajador el lunes por la noche en la casa que tenían los Amiridis en Nova Iguaçu, mientras que la esposa brasileña del funcionario "confesó haber participado" en el homicidio en su declaración realizada en la Delegación de Homicidios de la Baixada Fluminense.

Kyriakos y Françoise convivían desde hace 15 años, con una hija de 10. Según sospechan las autoridades, la mujer sería autora intelectual, mientras que el supuesto amante habría ejecutado al diplomático a puñaladas con la ayuda de un cómplice. La pareja reside en Brasilia pero estaban en Rio para pasar el Año Nuevo y vacaciones.