'Flakka' es un nombre alternativo a 'sales de baño', aunque muchos la llaman: "La droga del Diablo". Es muy utilizada en norteamérica pero -por suerte- todavía no se consume masivamente en el sur del continente.

Según los policías que encontraron a Austin Harrouff arrancando pedazos del rostro de sus víctimas, el joven de 19 años estaba bajo los efectos de esta droga. 

"Atacan a la víctima, muerden e incluso remueven trozos de carne. El agresor hacía ruidos como de animal. Rugía, gruñía", detalló la policía a los medios locales con respecto a los brutales efectos de las sales de baño.

Lo cierto es que estas drogas de diseño producen delirio eufórico y alucinaciones. Son estimulantes psicoactivos basados en la catinona: una sustancia presente en un arbusto de Medio Oriente.

Estar bajo los efectos de 'flakka' puede producir este tipo de comportamientos. Esto lo dijo el propio alguacil del condado donde encontraron al joven, William Snyder.

Otros hechos que se produjeron recientemente por consumir esta droga causaron conmoción en los Estados Unidos. El primero, un hombre desnudo que cruzaba de lado a lado de la vía del tren a plena luz del día.

El segundo se trató de un hombre que se empaló en la estaca de una reja de seguridad intentando huir de asesinos imaginarios. El tercero, intentó tirar abajo la puerta de vidrio de una estación de policía por defenderse de "huracanes" que lo azotaban.

Todos estos terribles hechos fueron en momentos diferentes pero tuvieron dos cosas en común: ocurrieron en Florida y como consecuencia de los efectos de 'Flakka'.