Carmen Barbieri a demostrado a lo largo de su carrera que es una mujer de armas tomar y de no guardarse nada. Lo demuestra cuando defiende a su hijo, Federico Bal y lo demostró cuando se separó de Santiago Bal. 

A raíz de los rumores de infidelidad concurrentes del padre de Federico Bal,  contó de una vez que le metió un "directo totalmente sorpresivo". 

El hecho sucedió en un restaurante muy concurrido por famosos llamado "El Corralón". En él se encontraba Carmen comiendo sola y Santiago Bal con un familiar, cuándo él la fue a saludar, la madre de Federico Bal entendió mal y sin mediar palabra le dio "un recto en los dientes". 

Agregó que decidió no hacerle una denuncia porque se le caería "la cara de vergüenza".