Juana Repetto se convirtió en mamá por primera vez el 12 de agosto, al traer al mundo a Toribio. La actriz, que decidió tener un hijo soltera y que tuvo ¡41 semanas! de embarazo, bregó siempre por un parto respetado, sin intervenciones. Por esa razón, decidió contar su experiencia a través de las redes sociales. 

"Como un día me dijo Lara mi partera (y mucho más q eso para mí) después de hablar durante meses de distintos partos y divagar sobre distintas posibilidades "un día vas a escribir tu propio relato de parto" y aquí estoy... No sé por dónde empezar pero ya se me hace un nudo en la garganta y se me llenan los ojos de lágrimas de emoción", comienza.

"Me daba cosita quedarme sola en casa y arrancar con trabajo de parto a la madrugada entonces empecé a armarme como una "agenda" con distintas personas que me acompañarán Decidí irme a lo de mi vieja por que el tema de estar organizando con quien pasar la noche ya me resultaba más estresante que una tranquilidad. Pasé unos días en lo de mi madre y nada, yo estaba bastante estresada, ansiosa, MUY hinchada y con muchos dolores, contracciones tenía hacía rato pero no eran ni regulares ni con ninguna característica de las de parto. [...] Jorge me explicó que el panorama estaba súper favorable y que la inducción sería mínima. Yo me sentía angustiada y frustrada por qué mi intento de parto sin intervenciones comenzaría con una intervención pero por otro lado sabía que se me había esperado un montón y que todos tirábamos para el mismo lado, un parto vaginal, que no dejaría de ser respetado y LO MÁS IMPORTANTE, bebé sano. Mi gran miedo era q la inducción terminara en cesárea[...]", confesó.​

"Desde ese momento tuve dos contracciones fuertes más y cesó... Fue un antes y un después pero el dolor no se fue del todo POR SUERTE. Enseguida entra Jorge a quien venía viendo desde la mañana vestido con su ropa pero esta vez con el ambo, QUE MOMENTO!!! Estaba por parirrrrr. Me acuesto para que me tacte pero en ese momento siento MUCHA presión en el cu... (perdón, no tengo otra forma de describirlo) se lo digo a Jorge y me dice que si tengo ganas de pujar puje. Así que ahí quede, acostada (había llegado con 8,9 de dilatación y con la peri llegue a completa en el acto)", detalló.

"Pujé, en la contracción siguiente (las re sentía) volví a pujar y así hasta la 4ta en la que pregunte si lo estaba haciendo bien y me dijeron que si, que estaba muy cerca y Jorge me hizo tocarle la cabeza, un flash, es como una cosa gelatinosa blanda no es lo que uno se imagina que va a sentir cuando toca una cabeza. En fin, ESTABA TOCANDO A MI BEBE. En la siguiente contracción puje con todo lo que me quedaba de fuerza, sabía que podía dejarlo todo en ese pujo por qué estaba ahí. Sabía que si pujaba con todaaaaas mis fuerzas salía y así fue. De repente veo su cabeza y a Jorge sacándole la circular de cordón que tenía, después salieron los hombros y ahí Jorge me hizo agarrarlo y entre los dos lo sacamos y lo pusimos en mi pecho. No lloraba, pregunte si estaba bien y él solito me respondió con un mini llantin. Increíble momento".

"Enseguida lo puse en mi teta, no se prendió pero ahí se quedó su primera hora de vida. Mi experiencia fue ALUCINANTE aún habiendo transitado uno de los mayores fantasmas que tuve durante el embarazo que era la oxitocina sintética. Y la peri bueno, quería intentar parir sin pero afloje al final a pesar de haber sido un TP corto, no yudo la inducción ya que las contracciones son más fuertes y encima rompí bolsa al toque, quizá de otra forma tampoco hubiese podido, no se, me da igual. Sentí todo y no me quedo ninguna duda ni intriga de nada, estuvo todo tan bien manejado por Jorge y Lara y yo tan bien acompañada por Vicky y finalmente también por mi mama que así como fue, para mí fue PERFECTO!"

Y finalmente agradeció a quienes la acompañaron, y a su hijo en especial: "Y a mí Torito gracias por permitirme vivir todo esto y formar conmigo el mejor equipo desde el parto y para siempre...".