"Trump dice lo que piensa. A veces no es bueno, a veces no estoy de acuerdo con él. Ha dicho muchas cosas, pero la prensa a menudo le presenta como un monstruo sin razón. Si tengo que elegir entre él y Clinton, yo prefiero a Trump. ¿Por qué? Porque Clinton afirmó que seguiría el rumbo político de Obama", planteó Clint Eastwood en diálogo con la revista Esquire.

Y sentenció: "Yo no he respaldado a nadie. No he hablado con Trump ni con nadie. Él es ahora un racista porque hace esas valoraciones. Y sí, son tonterías. Quiero decir, predica su opinión sobre el hecho de que un hombre tiene padres mexicanos o algo así. Dice muchas tonterías, como todos ellos, ambos lados. Pero la prensa y todo el mundo dice ´Oh, bueno, eso es racista´ y lo están arruinando. Sólo hay que superarlo. Es un momento triste en la historia".

Además reflexionó: “Todo el mundo está harto, en secreto, de la corrección política. Es la generación de lameculos con la que vivimos ahora. Vivimos en una generación de nenazas. Todo el mundo va pisando huevos. Hay personas que acusan a otras de ser racistas y todo eso. Cuando yo era pequeño, eso no era ser racista. Y luego cuando hice Gran Torino hasta mi socio me dijo: ‘El guión es muy bueno, pero es políticamente incorrecto’. Yo le contesté: ‘Dale. Déjame que lo lea esta noche’. A la mañana siguiente, fui, le tiré el guión al escritorio y le dije: ‘Lo vamos a empezar inmediatamente”.

El actor de Hollywood reconoció que votó por Trump aunque no lo apoyó públicamente en su campaña como sí hizo, en 2012, con Mitt Romney cuando tuvo un monólogo con una silla vacía que representaba al candidato demócrata de ese entonces, Barack Obama.