"La gente está comprando estrictamente lo necesario. Cada vez viene más seguido al supermercado. Antes hacía una compra semanal y ahora viene una vez por día o cada dos días", describió Ricardo Cáceres en declaraciones a la agencia Télam.

"El gasto promedio por compra es de $180, $200 y se están vendiendo muchos productos de segunda marca, especialmente en comestibles y bebidas", describió el supermercadista que tiene locales en Formosa, Chaco y Corrientes.

Dijo que "vemos con buenos ojos el amesetamiento de la inflación, pero nos preocupa bastante que algunos proveedores quieran aumentar los precios de sus productos", señaló.

"Nosotros somos trasladadores de precios, los formadores son los fabricantes", señaló y se quejó de que un aumento en los valores de la mercadería que llega de la industria pueda repercutir en los precios que finalmente paga el consumidor.

La FASA tiene asociados a 596 supermercados y cadenas regionales que a su vez agrupan a cerca de 8.000 sucursales en el interior del país.

Fuente: Ámbito Financiero