El turismo viene experimentando una caída respecto a años anteriores, situación que se repite en estas vacaciones de invierno, que en 17 provincias comenzaron este lunes y con muy poco movimiento: pocas reservas a la espera de turistas “gasoleros”.

La inauguración del receso escolar coincidió, en la mayoría de las provincias, con el fin de semana largo por el Bicentenario de la Independencia, por lo que "al menos 1 millón de personas salió de viaje", según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

Sin embargo, de acuerdo con la CAME, la permanencia promedio de estadía en los sitios turísticos fue muy corta y “con bajas ventas para el comercio”, cuando en realidad “se esperaban más familias que permanezcan más allá del fin de semana aprovechando las vacaciones de invierno”.

Además, el organismo detalló que “la falta de poder adquisitivo se notó, y en general se paseó mucho pero se gastó poco".

Según los datos de la Confederación, en Santa Fe, durante el fin de semana largo, "la ocupación hotelera se segmentó como en otras provincias: los hoteles de varias estrellas trabajaron al 70 por ciento, los de tres estrellas al 50 por ciento y los hoteles de pasajeros casi sin ocupación”.

En Entre Ríos, en tanto, "a pesar del esfuerzo, el turista acusó la situación económica y la circulación de gente fue inferior a otros años, a otros feriados y a lo esperado".

"En Puerto Iguazú, que se está moviendo con un 15 por ciento de turistas menos que el año pasado, hubo un buen tránsito de gente este fin de semana, impulsado por el receso escolar en varias provincias”, precisó la CAME, aunque advirtió: “Igual los niveles son menores al 2015 en la ciudad de las cataratas".

Por su parte, en la provincia de Buenos Aires las vacaciones recién comienzan la semana próxima, aunque las reservas hoteleras para el 16 de julio alcanzan aproximadamente el 50 por ciento, misma cifra que se observó el fin de semana largo.