Según afirman fuentes del Ministerio de Hacienda al diario La Nación, la inflación “se desaceleró en la segunda quincena, luego del 1,3 por ciento que dio en la primera".

Nada más alejado de la realidad: es justamente en esta segunda quincena de julio que el dólar toca su techo histórico y es en esta semana de julio o en la próxima que su precio podría llegar a perforar ese techo.

Y todo el mundo coincide –tanto especialistas como consumidores– que esa suba de la moneda norteamericana ya impacta en los precios finales de todos los productos.

Por tal razón  hay coincidencia general con que la inflación de este mes rozará el 2 por ciento, décimas por arriba o por abajo, pulverizando las expectativas que los funcionarios macristas pretenden instalar en la sociedad, sobre una baja o siquiera atenuación en la escalada de precios.

Un relevamiento realizado entre consultores por el ya citado diario, da cuenta de ello.

Juan Luis Bour, economista jefe de FIEL, estima una inflación para la ciudad de Buenos Aires del 2,1 por ciento; mientras tanto, Camilo Tiscornia, socio de C&T, estima un alza del 2 por ciento para el mes y del 21,5 por ciento para el último año.

Por su parte, Gabriel Zelpo, economista jefe de Elypsis, dice que el cálculo del IPC nacional les da cerca del 2,1 por ciento para este mes; en tanto, Fausto Spotorno, economista jefe del estudio Ferreres, ubica la inflación de julio en el 2,1 por ciento, lo mismo que el director de Macroview, Pablo Goldín.