Como había adelantado el jefe de Gabinete, el Poder Ejecutivo envió a Diputados un proyecto de reforma al impuesto a las Ganancias que, básicamente, aumenta poco y nada el mínimo no imponible para ser alcanzado por el tributo.

Frente a otros proyectos en danza, como el Sergio Massi, que implica un piso de 48.000 pesos para los trabajadores casados con dos hijos y 34.000 pesos para los solteros, el nuevo mínimo que pretende el Gobierno parece menos que nada.

En concreto, prevé una suba del 15 por ciento en el mínimo no imponible, cuando ese mínimo no se modifica desde 1999 y en un año en el que hubo paritarias que promediaron poco más del 30 por ciento.

En efecto, el proyecto oficial Ganancias sube el mínimo para solteros a 21.712 pesos netos por mes y para casados con dos hijos a 29.325 pesos al mes. Pero también modifica las alícuotas: desde el 5 por ciento (y no del 9 como hasta hoy) y hasta el 35 por ciento para los salarios más altos.

No obstante, quienes sean alcanzados por el impuesto no podrán deducir a sus cónyuges ni tampoco a sus padres y abuelos; en el caso de los hijos, solo podrán deducirse hasta los 18 años y no hasta los 24, como ocurre ahora.