Una mancha sobre el final estropeó otro triunfo en casa para los Spurs. A menos de dos minutos y medio para el final del juego, Ryan Anderson impactó su rodilla derecha contra la pelvis de Emanuel Ginóbili, que no soportó el dolor y tuvo que ir directo a los vestuarios.

El golpe fue involuntario, pero 'Manu' quedó tendido en el suelo dolorido. Logró pararse gracias a la ayuda de sus compañeros.