A pesar de ser idolo en Arabia, Ramón Díaz fue despedido de la noche a la mañana para la sorpresa del mundo del fútbol. Es que el riojano venía realizando una campaña alucinante con el Al-Hilal: en menos de un año se coronó campeón de la liga local y de la Copa del Rey de Campeones. Además, llegó por primera vez en la historia del club a la final de la Champions League de Asia, donde perdió por 2-1 en el global.

No obstante, tuvo que irse por la puerta de atrás por un motivo inaudito. ¿Cuál? El dueño de Al-Hilal quería que dos jugadores designados por él fuesen titulares. Ramón se negó y, ante esta situación, le pidieron que saque a su hijo Emiliano del Cuerpo Técnico. Obviamente, el riojano tampoco aceptó esta condición y es por eso que fue despedido.