"Yo sólo pido que no me silben aquí, es lo único que pido. Lo único que pido es que no me silben, porque yo doy siempre lo mejor y cuando no hago goles, intento trabajar y ayudar al Real Madrid", manifestó el goleador portugués, aún en el campo de juego, al finalizar el encuentro ante el Bayern Munich.

CR7 marcó cinco de los seis goles de su equipo en la serie, llegó a los 101 en la Champions League y, como si fuese poco, desde hace un tiempo ya es el máximo goleador histórico del club blanco.

"Jugamos muy bien. El Bayern es un equipo que puede hacer goles en cualquier campo, pero Real Madrid es el Real Madrid. En el primer tiempo tuvimos muchas oportunidades, podríamos haber hecho uno o dos goles, y en el segundo tiempo también. El Real está acostumbrado a sufrir, pero ganamos", cerró el portugués.