Su mejor ranking, 4º del mundo, lo alcanzó por primera vez el 11 de enero de 2010, pocos meses después de ganar el Abierto de los Estados Unidos. Pero una cirugía en la muñeca derecha (la primera de tantas), en mayo de esa temporada, hipotecó sus posibilidades de llegar a la cima del ranking ATP.

En enero de 2014, 'Delpo' volvió al cuarto escalón del escalafón y muy pocos puntos lo separaron del número 3, pero nuevamente las operaciones de muñeca -esta vez, de la izquierda- le quitaron la ilusión y lo hizo retroceder muchos casilleros.

Pasado el mal trago, esta temporada la arrancó sin ninguna lesión y goza de su buena salud. Por primera vez en cinco años, logró comenzar a competir desde enero y pudo prolongar sus actuaciones durante los primeros dos meses de acción oficial.

El actual 8° del mundo viene de ganar el ATP 500 de Acapulco -el primero de ese nivel desde Basilea 2013- eliminando a tres Top10 y mirando el calendario, lo positivo es que tiene una escasa cantidad de puntos por defender de 2017: en Indian Wells, Miami y Roland Garros quedó afuera en tercera ronda, mientras que en Wimbledon se fue en segunda.

Más allá de esto, lo que tiene que aprovechar el oriundo de Tandil es que sus principales competidores por el N°1 -a excepción del actual, Roger Federer- están lesionados de gravedad y no tienen fecha concreta de retorno. Esos son los casos de Djokovic, Murray y Nadal. Un escalón por debajo, Wawrinka, Raonic y Nishikori se encuentran en la misma situación.

"El número uno era un sueño de chico. Estuve cerca algunos años, cuando estaba cuatro o cinco, pero tenía arriba a cuatro de los mejores jugadores de la historia", dijo Del Potro, en diciembre de 2016.

Después de sus cuatro cirugías de muñeca, a Del Potro sólo le queda enfocarse y concientizarse de que puede ir a la caza por el fenómeno suizo de 36 años y dar un golpe al tenis mundial. ¿Podrá?