"Siempre me voy a sentir jugador de fútbol", había dicho Verón hace poco tiempo y este domingo lo hizo realidad. Y que falten menos de dos meses para que cumpla 42 años no lo amedrenta para reinsentarse en la alta competencia.

Con poco público en el  Bright House Networks Stadium, en Orlando, Verón hizo realidad su regreso a la actividad en el 1 a 0 ante Sport Bahía, de Brasil, por la Florida Cup. Lo hizo como capitán y con el N° 11 en la espalda y disputó los 45 minutos del primer tiempo.

La Brujita ocupó el doble pivote junto con Israel Damonte, quien hizo el mayor despliegue físico en la zona media. Estudiantes cambió su esquema habitual de línea de cuatro por uno con tres zagueros. Verón conserva el buen toque de pelota y visión de juego. Realizó 20 pases correctos; algunos de ellos, de seguridad, como cesiones cortas o hacia atrás. Hizo dos envíos largos precisos y su asistencia más profunda fue hacia un desmarque de Auzqui. Su planilla se completó con cinco pases incorrectos, una pérdida, dos quites, un despeje, tres foules cometidos y uno recibido.

Verón también fue el dueño de la pelota parada: ejecutó cuatro tiros libres, ninguno al arco, dos en forma de centro y dos en cesiones largas. Algunos entendimientos perduran en el tiempo: a los 11 minutos realizó un córner desde la derecha que Leandro Desábato cabeceó por encima del travesaño. El zaguero central, que el martes 24 de enero cumplirá 38 años, es uno de los compañeros que se mantienen desde el partido que había sido la despedida de Verón, el 18 de mayo de 2014, en la derrota por 2 a 1 contra Tigre por la última fecha. 

El partido fue bastante friccionado. Sport Bahía viene de ascender tras dos años en la segunda división brasileña. Con Verón en la cancha, Estudiantes se puso en ventaja con un gol en contra de Tinga en un mal despeje.

Para la segunda etapa, Verón fue reemplazado por el "Chapu" Braña.

"Después de tanto tiempo, fue mejor de lo que pensaba. Bastante bien, no digo muy bien. Tengo que profundizar en el ritmo", se calificó Verón, que había observado el segundo tiempo al costado del banco.