Luis Suárez se tuvo que retirar del terreno de juego en el minuto 56 tras lesionarse en la parte posterior de su muslo derecho. El delantero uruguayo pisó mal tras intentar controlar un balón y acto seguido se agarró el muslo.

Suárez se retiró rengueando y visiblemente afectado, hasta el punto de que no aguantó las lágrimas una vez en el banquillo. Sus compañeros apenas pudieron consolarlo, consciente de que el comienzo de la Copa América está muy próximo y peligra seriamente su participación.