Estaba la fiesta preparada, en el día del cumpleaños y con el Monumental repleto; pero Independiente de Medellín dio el batacazo y River, que presentó un equipo alternativo, cayó 2-1, perdió el invicto en la Copa Libertadores y no será el mejor de los punteros.

Un empate le alcanzaba para asegurarse definir todos los próximos cruces de local, y encima de movida tuvo la oportunidad de comenzar a inclinar el trámite. El ‘Millonario’ salió con todo, y antes de los cinco minutos pudo ponerse en ventaja por un penal que falló Lucas Alario.

El delantero, que venía en un gran momento, pateó al medio, pero recibió el rebote y Nacho Fernández la mandó a besar la red, aunque el árbitro anuló la conquista por una supuesta mano del ‘Pipa’, en lo que fue la primera polémica de la noche.

El conjunto argentino siguió insistiendo y siendo protagonista, y no pasó mucho hasta que el árbitro brasileño Raphael Claus volvió a estar en el ojo de la tormenta al no sancionar una clara mano de un jugador del DIM, que hubiera significado otro penal para River.

El primer tiempo se fue sin goles, y para el complemento el equipo de Marcelo Gallardo lució muy desconocido. Fue creciendo la figura del pibe Maxio Velazco, con intervenciones muy positivas en el arco, pero tras algunas fallas defensivas, John Hernández abrió la cuenta a los 3 minutos.

No pasaron ni 10 cuando el DIM volvió a lastimar, y por medio de Mosquera, que le rompió el arco al arquerito, puso el 2-0 que comenzaba a hacer peligrar el invicto del conjunto del ‘Muñeco’, que entonces movió el banco y mandó a algunos habituales titulares a la cancha.

Uno de los que ingresó fue Sebastián Driussi, que participó activamente en el descuento: definió el delantero, pero la pelota pegó en el travesaño, tras el despeje del arquero; y el rebote le quedó al ecuatoriano Arturo Mina, para que anota de cabeza.

Más allá de las ganas, River no pudo lograr el empate, e incluso pudo haberlo perdido por algún gol más de diferencia, de no ser por la gran actuación de Velazco. Así, perdió el invicto en el certamen, y quedó primero con 13 puntos, a la espera de sorteo de los octavos.

Por su parte, la gran victoria le sirvió al DIM para meterse en la Copa Sudamericana, ya que, además de ganar, necesitaba una mano del flojo Melgar, aunque Emelec no dejó dudas de local, ganó su juego y clasificó como segundo, con 10 unidades.