Guillermo Szeszurak, entrenador de Excursionistas, reclamó a la AFA y las autoridades protección tras la golpiza a manos de barras de Comunicaciones el fin de semana pasado en un partido de Primera B Metropolitana.

"Vivimos al filo de la muerte", alertó Szeszurak esta mañana, dos días después de la agresión de barras de Comunicaciones, en la que terminaron golpeados varios futbolistas.

"Había unos sesenta barras con caños y cuchillos. Estaba todo organizado, no fue casualidad", sostuvo Szeszurak al canal TyC Sports antes del entrenamiento en la cancha del barrio de Belgrano. 

El entrenador eximió a la dirigencia de Comunicaciones y lamentó la ausencia de policías al momento de los incidentes, aunque dijo que luego "llegaron unos 30 ó 40" efectivos.
 

Una rivalidad entre barras y futbolistas


La rivalidad entre barras de los dos equipos, data de hace más de tres lustros, en abril de 2000, cuando barras de Excursionistas entraron al campo de juego y atacaron a jugadores de Comunicaciones.

El delantero Adrián Barrionuevo, entonces de 30 años, fue internado sintetizó "pensé que me moría".

"Primero recibí una patada fuerte en la rodilla izquierda, que pareció que me había movido la rótula. Después me pegaron patadas en la nuca, en la cabeza, en las costillas, en la espalda, en la columna y paralíticas. "Hasta me mordió un perro!", contó según la crónica de entonces del diario La Nación.


Hoy Szeszurak hizo un reclamo similar al que hizo Barrionuevo hace 17 años, pidió protección a las autoridades y a la AFA.