Fue, es, el responsable de la suspensión de uno de los clásicos más escandalosos de la historia y por ello tuvo que ir a la justicia a defenderse de la demanda civil que le interpuso Boca Juniors por los daños y perjuicios ocasionados por esos hechos, que terminó con el club eliminado de la edición de la Copa y además con una sanción económica de la Conmebol.

En su declaración por los incidentes del partido de vuelta de los octavos de final de la Libertadores de 2015, Napolitano dijo que "no es -ni nunca lo fue- un 'barra brava', no vive de los 'negocios' que rodean al fútbol, ni de los legítimos ni de los otros". Sin embargo dijo que es "lo que suele llamarse un verdadero fanático de Boca Juniors".

En un escrito de 17 páginas, firmado por su abogado, Jorge Alberto Robin, Napolitano aseguró que "sólo quiso hacer una broma pesada, causarles molestias a los jugadores del equipo adversario".

"Nunca tuve la intención de llegar a dañarlos físicamente", aseguró en referencia a los jugadores de River, además dijo que "jamás estuvo en su intención perjudicar al club de sus amores". Y aseguró que Boca es lo más importante para él, luego de su familia.

Una jodita que salió mal

La parte más jugosa de la presentación es la siguiente: "Jamás pensó ni por un instante que por esa 'broma', esa 'jodita', podía llegar a suspenderse y darse el partido por perdido y que el club por el que se desvive iba a quedar descalificado y fuera del torneo que más interesa a todos los hinchas de fútbol".

El hombre admitió que el gas pimienta que ingresó a la cancha lo tenía para "defensa personal", y que lo tenía oculto "entre sus genitales" para evitar "problemas con el cacheo".

La explicación

"A punto de finalizar el entretiempo y cuando los jugadores de River estaban por reingresar a la cancha se acercó al alambrado para hacer lo de siempre: insultar a los jugadores del otro equipo, propio del folclore del fútbol".

"Allí advierte que entre la manga y la escalera por la que se asciende hasta la cancha había un agujero, como que la lona estaba descocida o rota".

"Al advertirlo tuvo la pésima ocurrencia de sacar el tubito de gas pimienta y arrojar parte de su contenido en forma de spray hacia el interior de la manga, sin advertir que estaban pasando los jugadores de River".

Y que "simplemente accionó el spray hacia adentro de la manga, a título de broma".

Por qué rechaza la demanda

Justamente, por ese supuesto agujero en la manga, solicitó que sea rechazada la demanda civil en su contra que tramita ante el juzgado civil número 54, a cargo del juez Adrián Remo Del Federico.

Ya que su defensa entiende que "de haber estado la manda en perfecto estado de colocación y mantenimiento, nada, absolutamente nada de lo ocurrido habría pasado".

"El accionar (broma o querer molestar) al haber arrojado el gas pimienta al interior de la manga y por una abertura que ya existía, que no debía haber estado de encontrarse esa manga en buenas y adecuadas condiciones para proveer la seguridad que no logró nunca pudo preveerse ni siquiera la consecuencia".

"La colocación, control y seguridad de la manga estaba a cargo de los codemandados ISM International Soccer Marketing y de su representante operativo local, Daniel Pérez Adonis. La misma actora incumplió con su ineludible deber de seguridad de tan sensible aspecto, el de la correcta instalación y verificación del buen estado de conservación de la manga. La misma damnificada, con su incumplimiento, facilitó, hizo posible, la ejecución de su 'jodita'".