Finalmente, la bielorrusa (de origen ucraniano) Svetlana Alexievich se quedó este jueves con el Premio Nobel de Literatura 2015, elegida por la Academia Sueca entre los 210 nominados porque "su obra polifónica es un monumento al valor y al sufrimiento de nuestro tiempo", según estableció el jurado.

Su libro más conocido, 'Voces de Chernóbil', fue publicado en enero de este año por Debolsillo en la Argentina, en el que pone de relieve, como si fuera una tragedia griega, con coros y unos héroes marcados por un destino fatal, las voces silenciadas durante muchos años de quienes sufrieron en carne propia aquel desastre nuclear.

Es autora también de 'U wojny ne zenskoje lizo' ('La guerra no tiene rostro de mujer', 1985; ed. act. 2008), 'Zinkovye malchiki' ('Los muchachos de zinc', 1989; ed. act. 2007), 'Poslednie Svideteli' ('Últimos testigos', 2004) y 'Vremya sekond-khend' ('Tiempo de segunda mano', 2013).

Recibió el Premio Ryszard-Kapuscinski de Polonia (1996), el Premio Herder de Austria (1999), el Premio Médicis de Ensayo en Francia por Tiempo de segunda mano (2013) y el Premio de la Paz de los libreros alemanes (2013), entre otros

El miércoles tocaba el turno al premio correspondiente a Química, que fue ganado por el sueco Tomas Lindahl, el norteamericano Paul Modrich y el turco Aziz Sancar, por sus investigaciones sobre la mecánica en la reparación del ADN.

El día anterior, la Real Academia Sueca de las Ciencias otorgaba el premio en Física al japonés Takaaki Kajita y el canadiense Arthur B. McDonald por sus investigaciones sobre las oscilaciones de los neutrinos, que demuestran que estas partículas tienen masa.

Y el lunes pasado, el irlandés William Campbell, el japonés Satoshi Omura y la china Youyou Tu eran los ganadores en Nobel de Medicina por su lucha contra la malaria y los parásitos.