"El espíritu de las PASO fue salir de ese padrón viciado. Por qué temerle a ese instrumento", dijo el ex ministro del Interior y Transporte en la reunión que tuvo esta semana junto a los dirigentes bonaerenses que apoyan su candidatura. 

Randazzo hizo pública su intención de encabezar una lista que compita dentro de una interna amplia en el Frente Para la Victoria. Su postura se choca de frente con la intención del sector más amplio del peronismo, que lidera Cristina Fernández de Kirchner, y que propulsa una lista de unidad para ir juntos a enfrentar al gobierno de Mauricio Macri en las legislativas. 

"¿Por qué significa participar en las PASO estar alejados de una victoria, es falso eso. Cuando confiamos en lo que dijeron ellos nos fue mal", dijo en un video que trascendió del encuentro que el hombre de Chivilcoy mantuvo en San Telmo esta semana.

Un día antes, Máximo Kirchner renunió a la mayoría de los intendentes del conurbano del FpV en un asado clave. Entre ellos estuvieron Verónica Magario, jefa de La Matanza, el municipio más grande la Provincia, y Martín Insaurralde de Lomas de Zamora. El marido de Jésica Cirio y referente del grupo Esmeralda, Cirio sonaba como posible aliado de Randazzo, pero su presencia junto al líder de La Cámpora, debilita todavía más sus aspiraciones. 

Los que sí estuvieron con Florencio fueron Juanchi Zavaleta (Hurlingham) y Gabriel Katopodis (San Martín). Ambos, hasta acá actuaban junto a Insaurralde, pero hoy parecen estar distanciados. 

Además, Randazzo cuenta con el apoyo de Fernando "Chino" Navarro, del Movimiento Evita y del Senador Juan José Abal Medina.