En un operativo sorpresa, personal de Gendarmería allana la municipalidad de Berazategui,  el edificio de Av. Rigolleau 3150, y etiene a los empleados municipales en sus oficinas. No solo, además les prohíben abandonar las instalaciones, según los propios empleados denuncian en las redes. 

"No nos dejan salir de las oficinas, la Municipalidad está llena de gendarmes... montaron un gran show", le confió una trabajadora -que prefirió no revelar su identidad-, a Diario Registrado

Además, Gendarmería cortó internet y las líneas telefónicas. 

El allanamiento fue por orden del juez federal del Tribunal Nº 1 de Quilmes Luis Antonio Armelia, informó la agencia Télam esta tarde, y se originó tras una denuncia por presunto enriquecimiento ilícito contra el intendente Juan Patricio Mussi y otra por malversación y defraudación sobre los Planes Argentina Trabaja que coordinaba el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.

El magistrado le relató a Télam que "la denuncia provino de un médico de apellido Nadaz y la radicó en el Tribunal de Cuentas de la provincia de Buenos Aires" y aclaró que es posible que realicen otros operativos para hallar información.

Fuentes municipales contaron que desde Gendarmería "dieron vuelta todo buscando papeles de manera brusca y rompiendo cajones" y analizaron que "ya realizaron este año dos allanamientos por un tema relacionado con el agua. Es evidente que es una persecución política".

El intendente no se encontraba en el palacio municipal ya que tiene un pedido de licencia aprobado por el Concejo Deliberante. En su lugar, sí está el jefe comunal interino, Juan Carlos Valor. Fuentes del municpio señalaron a este medio que resulta "muy llamativo" que el allanamiento se produzca justo en esta semana en la que Mussi se encontraba ausente con el debido aviso.