La NASA alcanzó un hallazgo que sorprende a sus propios científicos, y se trata de una gigantesca nube de hielo ubicada en una de las lunas de Saturno.

El descubrimiento se realizó gracias a la expedición de la nave espacial Cassini sobre la estratósfera de Titán, el satélite más grande el planeta, donde, según informaron los investigadores, el invierno dura 7,5 años naturales, aunque la próxima vez que se repita esta estación será aún más dura.

En 2012 los científicos ya habían descubierto una nube similar. Sin embargo, ahora pueden afirmar que eso fue solo "la punta del iceberg", a la vez que en este caso se mostraron sorprendidos por el tamaño del fenómeno.

"Cuando nos fijamos en los datos infrarrojos, esta nube de hielo sobresalió como nada que hayamos visto antes", dijo Carrie Anderson del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA en Greenbelt, Maryland, y añadió: "Prácticamente nos golpeó en la cara".

La nube se encuentra a solo 200 kilómetros de la superficie y fue descubierta gracias a los instrumentos infrarrojos del Cassini, que obtiene los perfiles de la atmósfera en longitudes de onda térmicas invisibles.

La nube tiene una densidad baja, similar a la niebla de la Tierra, pero sería plana en la parte superior, según informa la NASA.