Para combatir la disfunción sexual, científicos se encuentran analizando la utilización de robots sexuales, que en un futuro no muy lejano podrían hasta llegar a ser recetados por los médicos.

Son muñecas o muñecos de silicona, que funcionan a través de Inteligencia Artificial, y que podrían llegar a los usuarios en poco tiempo a partir de los recientes avances en biotecnología, de acuerdo con una publicación de la revista científica neoyorquina, Psychology.

Estos robots sexuales serían recetados por los médicos, con el objetivo de convertirse en un estímulo para quienes sufren disfunción sexual o para abordar trastornos psicológicos.

Pero todo tiene su contra, ya que la publicación advierte que estos avances podrían tener un efecto “devastador” para la sociedad, debido al temor que como resultado de su utilización, disminuyan los matrimonios y la tasa de natalidad.

Es que expertos ya han advertido ante la posibilidad de que el auge de estos muñecos pueda derivar en el aumento de la adicción al sexo, que se centraría en un placer artificial y no precisamente en relaciones sexuales naturales, lo que derivaría en efectos perjudiciales para la sociedad.