De acuerdo con los astrónomos, las Delta Acuáridas Sur son una lluvia de estrellas muy curiosa que procede del cometa 96p/Machholz 1, situado fuera de nuestro Sistema Solar. Sus partículas de polvo y hielo chocan con nuestra atmósfera a 41 kilómetros por segundo y las hace muy visibles para el ojo humano.

En comparación con las Delta Acuáridas Sur, la lluvia de Alfa Capricórnidas, originada por el cometa 169P/NEAT, no será tan abundante. Sus meteoros son mucho más lentos, pero también tiene una trayectoria larga y brillante que aumenta su luminosidad tras explotar antes de apagarse.

Los astrónomos señalan que las partículas de esta lluvia alcanzan el tamaño de una pelota de tenis, un riesgo para los satélites artificiales e incluso para el funcionamiento de la Estación Espacial Internacional (ISS), puesto que estos objetos viajan por el espacio a unos 100.000 kilómetros por hora.

Las Delta Acuáridas Sur, que ofrecen su espectáculo desde el 12 de julio hasta el 23 de agosto, y las Alfa Capricórnidas, que serán activas desde el 3 de julio hasta el 15 de agosto, por su parte, se unirán la mencionada noche para hacer visibles en su máximo esplendor, cuando la luz que refleja la Luna no estorbará a los observadores del hemisferio Sur.